Durante la última década que fue interesante, la de los noventa, ocurrió la época de oro de las Supermodelos, y en ese Dream Team, Christy Turlington tenía un lugar preponderante junto a la Campbell, la Evangelista, la Schiffer y la Crawford, entre otras.
De todas ellas, Christy es la que mejor ha sido tratada por el tiempo. No sé si tenga que ver porque se volvió adicta al yoga, a un estilo de vida sano, a la defensa de los derechos animales y en fin, a todo lo relacionado, el caso es que no sólo se sigue viendo -casi- igual que en sus mejores años, el asunto es que no ha perdido nada de sensualidad.
A mi entender, Christy Turlington es la más guapa de las supermodelos de su época, no es mi favorita, pero sí la que, en general, era más cercana a la perfección, ya que las citadas allá arriba la verdad siempre se me hicieron medio desabridas.
Desgraciadamente padece el clásico síndrome de los pies de modelo, son feos. Dedos larguísimos, como garras, huesudos igual que el empeine y pies muy maltratados en general por culpa de las pasarelas, aunque hay que reconocer que desde que le entró a la onda Zen se le han mejorado bastante.
Calificación a los Pies de Christy Turlington: 7
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